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Cuidados del cachorro en casa: cómo elegir el apropiado
¿Qué debo tener en cuenta para la llegada de un cachorro a casa?
Con la llegada de la Navidad y Reyes, proliferan las familias que deciden traer un miembro más a la familia: un cachorro. Si en la familia hay niños, lo primero que deberemos hacer es mentalizar a los niños de que un cachorro no es un juguete, que crecerá deprisa y, por ello, será necesario educarlo y, sobre todo, que habrá que atenderlo y preocuparse de sus cuidados.
Un cachorro no deja de ser un bebé, así que al igual que planificamos la llegada de un bebé a casa, debemos preparar el aterrizaje del cachorro en casa. Deberemos tener listos sus enseres personales: cama, dos recipientes adecuados a su tamaño para agua y comida, un cepillo para su pelo, collar y correa y algún juguete (peluches, mordedores…). Lo aconsejable sería hacer una visita a quien será su veterinario para que nos indique en función de la raza o características, el tipo de comida más adecuado, confirmar cuando le llevaremos para su primera revisión, colocar su chip identificativo y comenzar con la rutina de sus desparasitaciones. Algo que no debemos olvidar es tener siempre a mano y conocer los teléfonos, horarios y consultas de urgencias. Nunca se sabe cuando puede haber un imprevisto.
Su higiene será, sin duda, clave para su desarrollo y para la convivencia con nosotros en casa. Se trata, por tanto, de una elección de productos consciente, en la que merece la pena invertir algo de tiempo porque en ningún caso podremos utilizar productos de los que habitualmente usamos para nuestra higiene personal. Es mejor no bañar a nuestro cachorro si no tiene completo el calendario de vacunación, los cachorros como los niños, no controlan bien la temperatura y para ellos el baño no es algo natural, así que puede resultarle una experiencia un poco traumática. Existen en el mercado diversos tipos de champús para perros que nos ayudan con su higiene, algunos de ellos son antiparasitarios para eliminar pulgas y garrapatas, ahora bien, este tipo de champús sólo deben de utilizarse cuando ese problema de infestación exista, sino, sobre todo con los cachorros lo mejor es optar por champús suaves que regulen su ph y sean buenos para su piel y su pelo.
- Champú de uso frecuente.
- Champú 2 en 1 (con acción suavizante).
- Champú antiparasitario.
- Champú repelente.
- Agua de colonia (un complemento al baño y al acicalado diario junto con el cepillado)
Estos productos de higiene para perros de uso habitual deben complementarse con la desparasitación externa apropiada para cachorros: collar antiparasitario para cachorros, pipetas repelentes de pulgas, garrapatas y mosquitos y pipetas antiparasitarias (de uso en cachorros solo si están infestados). Y con todo preparado, solo nos queda elegir el cachorro perfecto para convivir con nosotros.
¿Qué cachorro debo elegir?
Antes que pensar en el cachorro como tal debemos saber el desarrollo del mismo, cómo será en su etapa adulta y qué exigencias nos va a suponer tener una raza o tipo de perro, frente a otros. Los cachorros son todos adorables, pero es un período que pasa pronto, así que debemos de decidirnos más que por el cachorro en sí, por el perro que será en estado adulto (estado que sí durará durante más tiempo).
Decididos ya antes la raza o tipo de perro, nos tenemos que enfrentar al difícil momento de elegir uno u otro de entre la camada, cuando todos y todas nos mirarán con unos ojos implorantes, con los que nos dicen todo. Las recomendaciones en general son decidirse por cachorros que veamos activos, alegres y robustos. Probablemente el que veamos más apartado y con aspecto poco saludable o triste será más probable que tenga algún problema de salud. También te ayudarán éstas pistas:
- Su pelaje debe estar intacto, sin clavas ni llagas, y a su tacto, suave y brillante.
- Sus encías deben estar rosadas, las orejas limpias y sin que desprendan mal olor, como su aliento.
- Su nariz, ojos y culete deben parecer limpios, sin irritaciones ni secreciones extrañas.
No olvides, cuando vayas a recogerle, deberás llevar un transportín adecuado a su tamaño, que también te servirá los primeros días como refugio o lugar donde dejarle tranquilo, cuando vayamos a salir de casa por períodos cortos de tiempo.
Con todo controlado, estaréis preparados para salir a pasear y jugar con él. ¡A disfrutarlo!
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